No sé cómo lo verás tú.
Pero este mundo se desmorona.
Y hay mucha gente que no lo ve.
¿Por qué?
Porque ocurre poco a poco y la mayoría no lo percibe.
Siguen atrapados en su rutina diaria, sin levantar la cabeza, como el que mira el móvil sin ver por dónde pisa.
Además, al ir degradándose todo lentamente, la gente se acostumbra.
Acepta cada nueva situación, aunque sea peor que la anterior, como si fuera normal.
Y así, paso a paso, lo insoportable se vuelve cotidiano.
¿Te acuerdas del experimento de la rana que se hierve si calientas el agua poco a poco sin que se de cuenta?
Pues eso.
Mira, yo ya tengo algunos años, y he vivido plenamente los 80 y 90. Y te puedo asegurar que nunca había visto un estrangulamiento tan fuerte sobre la ciudadanía como el de ahora.
Y si piensas “Bueno, aun siendo grave la situación actual, quizá se quede aquí la cosa…”
Ojalá.
Pero no.
Todavía no hemos tocado fondo.
La degradación continúa.
Todo irá a peor en todos los ámbitos.
Y cuando la mayoría despierte, será porque se habrá estrellado contra la realidad.
Para muchos, ya será tarde.
Si tú quieres estar en ese carro, adelante.
Pero muchos ya nos hemos bajado de este sistema y nos hemos decantado por Bitcoin.
El gran salvavidas en medio de este océano.
Por eso los bitcoiner estamos tan tranquilos.
¿Sabes por qué?
Porque Bitcoin te da una paz interior INMENSA.
Tenemos un plan B.
Sí, con B de Bitcoin.
Esa paz de saber que, cuando esto se hunda definitivamente y no haya vuelta atrás, poseeremos un trozo de riqueza con la que podremos irnos a cualquier parte y empezar de nuevo.
Sin pedir permiso a nadie.
Sin que nadie se entere.
Esa paz no te la da ninguna otra cosa.
No esperes a que este sistema colapse del todo y te deje sin opciones.
¡Actúa ya!
Acumula sats.
A tu ritmo.
Con lo que puedas.
Pero acumula.
⚡️ Nostr Señor