Normalmente, las monarquías en Europa tienden a ser más estables que las repúblicas, y sus resultados económicos son, incluso, mejores. Pero eso nunca se ve. (2/3)
La ideología nos hace ver un mundo que es irreal. Cuidado, que la ideología es muy poderosa, y todos la tenemos, yo no me excluyo de ella. Nos hace ver cosas que a lo mejor no se corresponden con la realidad. (1/2)
Antes usted veía a un trabajador y su empleador, y ahora ve un sistema de explotación. Antes veía a un marido y su esposa, y ahora ve un sistema heteropatriarcal. Ve un montón de cosas que le llevan a negar la propia realidad. (2/2) #PaleoLET
Entonces, uno empieza a estudiar el caciquismo y ve que todos lo insultan: que si es un atraso, que si es una vergüenza... Vale, pero el caciquismo es una política personal, es una política de intercambio. Yo le hago un favor a usted, y usted me hace un favor a mí. (4/7)
¿Quién es más listo, el que negocia con el cacique o el que come progreso, justicia e igualdad? Es más manipulable la persona que cree en esas cosas que la otra. (7/7) #PaleoLET
Otros, en cambio, prometen progreso, justicia, democracia, igualdad, equidad, interseccionalidad... ¿Y eso se come? (6/7)
Lo primero, ya saben que no me gusta mucho el poder político, pero también entiendo que, dentro del poder político, hay gradaciones. Los hay más despóticos y los hay que lo son menos, siendo todos condenables. Pero hay gradaciones, siendo unos más soportables que otros. (3/7)
Y de ahí viene que me guste explicar por qué sistemas que son tan denigrados aún subsisten, qué funcionalidades tienen y por qué se pusieron en su momento. (2/7)
Es un favor personal, no es un favor abstracto. Usted me arregla la carretera o me pone un punto de luz, una farola para alumbrar el camino, que antes no la había. Y yo a cambio le doy el voto. (5/7)