Si ya flipamos al saber que el índigo era una palabra viajera... ¿y si os digo que también lo es otro color, el MAGENTA?
Y esta vez no viene de la planta que se usa para su tinte. Es mucho más curioso: en la ciudad de Magenta, cerca de Milán, se libró una cruenta batalla en 1859. En esa época se había descubierto este tinte, que se llamó "fucsina", de "fucsia", y después "magenta" para celebrar la victoria italiana en esa batalla.
Industria, guerra y propaganda en las #PalabrasViajeras!